lunes, 18 de diciembre de 2017

Cosmética natural española, descubriendo La Malva Flor

Hola mimosas! Hoy toca hablaros de una nueva marca española de cosmética natural. Ya sabéis lo que me gusta descubrir y contaros estas nuevas marcas, que tenemos tan cerquita y que elaboran verdaderas joyas naturales.  En este post le toca el turno a La Malva Flor, una joven empresa afincada en el pueblo madrileño de Colmenarejo que elabora tal variedad de jabones, aceites y otros cosméticos que es imposible decidirse por uno sólo, ¿queréis saber más?


La idea de crear La malva Flor surgió a consecuencia de enfermedades dérmicas de sus fundadores y que tras probar con todo tipo de remedios en la cosmética convencional, fue gracias a lo natural que encontraron la solución. Desde ese momento comenzaron a elaborar sus productos y venderlos en ferias de artesanía de la Comunidad de Madrid, hasta que vieron el buen feedback que le llegaba de sus clientes y decidieron ir un paso más allá.

En La Malva Flor todo se hace a mano, desde el cosmético en sí, hasta el empaquetado. Utilizan aceites 100% vegetales de primera calidad como, oliva, coco, ricino, soja, girasol, manteca de cacao o karité, aceite de neem, argán, rosa mosqueta, arroz, de laurel,  etc.... Enriquecen los jabones con aloe vera, algas, levadura de cerveza, harina de avena, harina de quinoa, harina de soja ... Tienen jabones de las cosas más variadas posibles, como con leche de cabra, yogur, vino tinto, cerveza, e infusiones ,algas , y hierbas aromáticas. Además usan como colorantes, óxidos de hierro, especias, arcillas y micas, y pétalos de flores como: rosas, hibisco, geranio y los aromas proceden de aceites esenciales.



He podido probar varios productos de esta marca y he quedado más que contenta. Se nota como cuidan la elaboración. Los oleatos maceran mínimo 40 día al sol y a la luna, algunos están hasta seis meses!! Pero vamos al lio y os cuento que tal con cada uno de ellos!

Empecemos con los jabones que fue el motivo por el que conocí la marca. He probado el jabón de aguacate en tamaño normal y otros 4 en tamaño de mini lingotes. Esto me parece una idea estupenda para poder probar más variedad, dado que una de las características de la marca es su gran oferta de productos distintos.


El jabón de aguacate es regenerante e hidratante gracias a su riqueza en grasas. Tiene aroma a frutas tropicales según nos cuenta la marca, a mi me da olor a melón, lo cual se me hace muy curioso. Se hace con oleato de aguacate macerado al sol y luna durante 40 días, después el secado son otras 6 semanas. Todo este lento proceso hace que la piel quede muy confortable tras su uso. A mi me encanta usarlo en la ducha, pero de vez en cuando alargo la mano y me las lavo con él. Lo mejor es que no tengo esa sensación de tirantez tan desagradable de otras veces, con este jabón es imposible.




Otro de los jabones ha sido el de rosa mosqueta. Que os voy a contar que no sepáis de este ingrediente. La rosa mosqueta es perfecta para regenerar la piel dañada por una cicatriz, el sol… elimina manchas y cicatrices. A ver, estamos hablando de un jabón que permanece un tiempo limitado en la piel, pero todo suma. Este lingote lo he usado para la limpieza facial y es un placer! Además de aceite de rosa mosqueta contiene oliva y coco, mantecas de karité y cacao, infusión de rosa mosqueta,  hidróxido de sodio, aceites esenciales y vitamina E.



El jabón de centella asiática es un buen ejemplo de lo que os decía, que hacen jabones de un montón de ingredientes distintos. Es la primera vez que he probado un jabón con centella asiática, alga fucus, cafeína y cola de caballo. Con esos ingredientes tenía claro cual iba a ser su uso, corporal. Es perfecto para ayudar a las piernas cansadas, favorecer el drenaje linfático y ayudar en la lucha contra la celulitis. Su olor herbal es muy potente, despeja la mente y perfuma increíblemente todo el baño! Para la ducha de la mañana era el mejor!



Después os tengo que hablar del jabón de coco y canela. A mí me huele a coco hoy y a canela mañana, es muy especial. Lo uso como jabón facial y adoro la espuma densa que hace. El coco es un gran hidratante y la canela es fuente de vitamina C , por lo que este jabón tiene propiedades antioxidantes, motivo por el cual lo uso como facial. A mí me gusta dejar que la espuma haga efecto dejándola un ratito aplicada a modo de mascarilla. No lo hago todos los días, pero si cuando tengo tiempo y deja la cara, jugosa y con una luz muy bonita.


Por último en cuanto a jabones os hablo del baby soap. Este jabón me entró por la vista en cuanto lo vi!, ¿habéis visto que diseño más mono con los pies del bebe!! Me enamoró, no os puedo decir nada más! Está hecho con una mezcla de aceite de caléndula, aceite de coco y manteca de kárite, sin colorantes. Todo muy delicado para una piel tan especial y fina como la del bebe. Os confieso que este es el único que no he podido probar… es que no quiero que se estropee ese diseño!! Además de adorno es precioso!



Lo que si hemos probado para el peque ha sido el aceite de bebé. Lo que más me gustó fue su formulación, simple y corta, ¿para qué más? Aceite de almendras dulces de primera calidad y aceite de caléndula. Es perfecto para el cuidado del bebe y a él le encantan los masajitos que le da su mami! Al ser aceites naturales se absorben genial en la piel y no manchan su ropita cuando se la pongo inmediatamente después del masaje. Este es el formato de 30 ml con spray, lo cual me resulta muy cómodo, pero lo tenéis en formatos mayores.


Otro aceite que he de confesar se me acabó muy pronto y eso quiere decir mucho en mí, es el aceite de caléndula. Y es que no es el típico aceite de caléndula, tiene un olor único que no había probado hasta entonces, debe ser el toque de aceite esencial de litsea cubeba, porque no lo reconocía. Además de aceite de caléndula  contiene aceite de almendras dulces, aceite de soja, aceites esenciales y vitamina E.  Cuando más me gustaba usarlo era al darme un baño, con el poro dilatado y la piel húmeda, el aceite nutría la piel a la perfección y ese olor era un placer!

Otro producto que me ha gustado mucho y que de la caja fue directo al bolso, es el bálsamo labial de manteca de cacao y karité.  Su formulación es la justa y necesaria para proteger, curar y nutrir los labios. Combina la manteca de cacao, la de karité, el aceite de almendras dulces, la miel y la cera virgen. Lo tenéis en formato stick pero este es en tarro y al pasar el dedo, la gran cantidad de mantecas en su composición, hace que el producto se haga aceite con el simple calor corporal, lo cual lo hace perfecto para su aplicación. Desde que lo tengo no me separo de él y ahora con el frío aún con más razón.

Y finalmente el producto que más me sorprendió, el exfoliante de café y azúcar moreno. Chicas!!!! Esto es un vicio!! Que olor, que gustazo!! Es impresionante que aroma a café deja en toooooda la casa!! Mi chico me pidió una taza cuando lo olió y se quedó con las ganas! No había hecho café, sólo me había dado una ducha! Con el café se aportan efectos antioxidantes a la piel, estimulando la circulación y favoreciendo la pérdida de grasa y celulitis. Y como además tiene aceite de coco, es el perfecto 2 en 1. Sales de la ducha exfoliada y nutrida. Eso si, con un mono de café que ni os cuento!

¿Qué os han parecido los productos? Variedad y buenas composiciones, un placer para los sentidos, eso es La Malva Flor. Os invito a cotillear su web y veréis que cantidad de jabones tienen, a ver quién es capaz de elegir uno sólo! Y no dejéis de contarme en los comentarios si conocíais la marca y habéis probado alguno de sus productos, ¿recomendaciones?


Mismimitoss

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